Oleg Kotzarew

Nacido en Ciscaucasia, en la ciudad de Piatigorsk, desde la cual se divisa el monte Elbrs, que con sus 5.642 metros es el más alto del Cáucaso y de Europa. La efusión cultural, acrecentada en la segunda mitad del siglo XIX por la actividad turística, especialmente después de la habilitación de la línea ferroviaria entre Rostov del Don y Bakú, y robustecida en los albores del siglo XX, llevan a su padre Teodoro Kotzarew, a trasladarse desde San Petesburgo, donde se había formado como violoncellista, a Piatigorsk, entrada ya la década del 20. Cellista de la Orquesta Sinfónica de Piatigorsk, su padre enseñaba además en la Escuela de Música de Kislovodsk.

Siendo hijo único, los padres de Oleg Kotzarew quisieron que también él fuera cellista. A los ocho años inició sus estudios en Kislododsk, con su primer profesor, Teodoro Kotzarew.

En 1945, luego de la Segunda Guerra Mundial, se instala con sus padres en Roma, donde vivieron por tres años. La familia se trasladó en 1948 a Argentina, cuando el músico estaba por cumplir los diecisiete años. En 1949 se instala en Tucumán donde su padre había ganado un certamen para integrar la Orquesta Sinfónica de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT).

En 1949 cursa estudios en la Escuela de Música de la UNT, retomando los estudios de cello con el maestro Pilades Ricci. En 1952 gana concurso para una plaza de cellista en la Orquesta Sinfónica de la UNT. Poco después adopta la nacionalidad argentina.

Restablecida la democracia, en 1952 es convocado por el gobernador Celestino Gelsi, para integrar la Comisión Provincial de Cultura. Formó parte del Consejo Provincial de Difusión Cultural desde su fundación en 1959 hasta 1964.

En 1965, acepta la invitación del Camping Musical Bariloche, abandonando así Tucumán. A este momento sigue la fundación de la Camerata Bariloche.